Barreda Espinosa, Pedro de la


5 noviembre 1907 - 9 noviembre 1991

Barreda Espinosa, Pedro de la

Nació en Valverde, Isla de Hierro, Tenerife, el 5 de noviembre de 1907. Estudió la carrera de medicina en la Facultades de Medicina de La Laguna y Madrid. Durante la licenciatura fue alumno interno por oposición y trabajó junto a Juan Negrín López en la Cátedra de Fisiología y en el Laboratorio de Bioquímica de la Residencia de Estudiantes en Madrid. En 1930 fue pensionado por la Junta de Ampliación de Estudios para trabajar en la Universidad de Freiburg im Breisgau con Siegfried Josef Thannhauser. Tras tres años y renunciar a marcharse con Thannhauser a Estados Unidos, volvió a Madrid y en 1934 obtuvo el grado de doctor con la tesis Sobre el valor diagnóstico de las cargas perorales de colesterina.

Su vinculación a Juan Negrín da lugar tras la guerra civil a ser depurado y condenado a trabajos forzados en el Valle de los Caídos y posteriormente desterrado en Burgo de Osma y Matamala de Almazán en Soria. Tras poner en marcha Carlos Jiménez Díaz el Instituto de Investigaciones Médicas se incorporó a su equipo trabajando en él por las tardes mientras por las mañanas lo hacía en el en el Hospital Provincial. Mantuvo durante muchos años su consulta privada en Soria, a la que acudía los fines de semana. Posteriormente, en los años 60, se presentó a oposiciones a cátedra aunque sin éxito.

Sus aportaciones lo fueron ante todo en el campo de la hipertensión arterial. Sus trabajos sobre la función de secreción interna de la pared arterial fueron de gran entidad. En estudios experimentales realizados con Carlos Jiménez Díaz llegó a la conclusión de que alguna sustancia debería existir en la hipertensión experimental (producida por el estímulo del cabo central del vago cortado en el cuello), ya que mediante circulación cruzada con otro animal ésta se transmitía.

Estos trabajos, realizados en los años 40-50, pusieron de manifiesto que si se realizaba la excitación en un perro dador en circulación cruzada con otro receptor, se producía una hipertensión en el último, y que la sangre reservada del primero originaba hipertensión cuando se inyecta a un perro normal. Estos estudios les llevó a la conclusión de que la pared arterial segregaba algún fermento que actuando sobre el hipertensinógeno del plasma, liberaría la sustancia hipertensora, arteriohipertensina. Esta sustancia que no fueron entonces capaces de identificar está relacionada con la que en 1988 fue comunicada por Masashi Yanagisawa y hoy es conocida con el nombre de endotelina.

Aunque no creó escuela por su vinculación toda su vida al grupo de Carlos Jiménez Díaz, tuvo sin embargo una gran influencia en el ambiente de investigación creado en torno al maestro, colaborando y dirigiendo a muchos de los más capacitados investigadores que formaron parte del grupo.

Su producción científica escrita no fue numerosa aunque si de calidad. Entre sus publicaciones son de destacar: Sobre el mecanismo nefrogénico de la hipertensión (1949), Nuevos estudios sobre la función de la pared vascular en la regulación de la presión arterial (1950), La secreción interna de la pared arterial y la regulación de la presión arterial (1951), Role of arterial Wall secretion in the regulation of blood pressure (1954), La procedencia arterial de la substancia hipertensora (1955), La glándula presora en la hipertensión urológico (1955) y Normas para la prevención de las enfermedades hipertensivas (1966).

Muy ajeno al mundo de los reconocimientos, tuvo a gala sin embargo haber sido nombrado en 1952 Hijo Predilecto de El Hierro.

Falleció en Madrid el 9 de noviembre de 1991.

Bibliografía

AGA, Educación, expediente personal de Pedro de la Barreda Espinosa, 32/14897, caja 18876, topográfico 32/58 expediente 60, y caja 15556, topográfico 32/47 expediente 48.
JAVIER DURÁN. De colaborador de Negrín al destierro. La Provincia. Diario de Las Palmas, 17 de noviembre de 2010.

Autor: Manuel Díaz-Rubio