Royo-Villanova Morales, Ricardo

15 enero 1868 - 14 diciembre 1943

Royo-Villanova Morales, Ricardo

Nació en Zaragoza el 15 de enero de 1868. Estudió la carrera de medicina en la Facultad de Medicina de Zaragoza en el viejo caserón de Nuestra Señora de Gracia. Fue alumno interno por oposición y al acabar la carrera médico de guardia. En 1889 ganó por oposición una plaza de profesor clínico en la Facultad. En 1890 accedió el grado de doctor con la tesis titulada Valor semeiótico del esputo y en 1894 obtuvo por oposición la plaza de Catedrático de Patología y Clínica Médicas de la Facultad de Medicina de Zaragoza. Reconoció como a sus maestros a Manuel Alonso Sañudo y Jenaro Casas.

Reconocido clínico, excelente profesor y referencia obligada en su época en la medicina aragonesa. Profundizó en toda la medicina interna aunque prestó especial atención a los pacientes afectos con tuberculosis siendo uno de los iniciadores en España de la lucha antituberculosa, pudiéndosele considerar uno de los precursores de la tisiología. Su dedicación a este campo fue unánimemente reconocida. Organizó en Zaragoza, en 1908, el primer Congreso Nacional de la Tuberculosis que se celebró en España. En 1902 comenzó su campaña en Zaragoza que culminó con la fundación en 1904 de la que se denominó Obra de Defensa contra la Tuberculosis y con la creación de un Dispensario en 1906 en el Hospital Provincial, el segundo en el país tras el que creó José Verdes Montenegro y Montoro en Madrid, que dirigió y que posteriormente llevó su nombre y que compatibilizaría con su trabajo en la Cátedra. Completó todo ello con la construcción de un Sanatorio en San Juan de la Peña. El modelo de dispensario fue el denominado tipo Calmette, ocupándose de la prevención, educación, asistencia y saneamiento. Este dispensario, como otros de este tipo en España se basaba en una buena alimentación, mucha higiene y poco medicamentos. En su responsabilidad como Rector defendió con pasión la autonomía universitaria y contribuyó decididamente a la construcción de la Residencia de Estudiantes.

Su actividad docente fue además muy intensa. Con independencia de su labor en la cátedra organizó diversos cursos, muchos de ellos vinculados a la Academia Médico-Quirúrgica Aragonesa, sobre enfermedades respiratorias y sobre todo cursos de tisiología que tuvieron gran aceptación. Fruto de esta actividad y la recopilación de algunas de sus publicaciones fue el libro Como se curan los tísicos (Zaragoza, 1904), auténtico manual de tisiología. En 1902 fundó y dirigió la revista Clínica Moderna la cual se publicó hasta 1919.

Otros libros que publicó fueron Patología y clínica de la corteza cerebral: estructura, funciones y síntomas, causas, lesiones y curso diagnóstico, pronóstico y tratamiento (Zaragoza, 1906) y Epítome de Patología y Clínica Medicas para iniciación de estudiantes y recordatorio de médicos (Zaragoza, 1917). Publicaciones dignas de mención son también: La curación de la tisis (1900), Estado actual de la clínica terapéutica de la tuberculosis pulmonar (1908), El nuevo tratamiento del nuevo cólera (1911), Tratamiento sintomático de la tuberculosis pulmonar (1911), La vacunación preventiva y curativa de la fiebre tifoidea (1913), Secuencias extrapiramidales de la llamada encefalitis letárgica (1925) y Patología de los aviadores (1926). Destacaron igualmente sus publicaciones La locura de Don Quijote (1905), Miguel Servet (1927) y Fernando el Católico (1943).

Fundador y primer Presidente de la Academia Médico Quirúrgica Aragonesa así como Presidente del Ateneo de Zaragoza. En 1913 fue designado Rector de la Universidad de Zaragoza. Académico correspondiente de la Real Academia Nacional de Medicina en la que obtuvo el Premio Rubio. Fue también Senador entre 1919 y 1924 y Consejero de Instrucción Publica en 1921. Obtuvo multitud de distinciones y entre ellas la Gran Cruz de Isabel la Católica, la de Alfonso XII y la de la Beneficencia. Fue Hijo predilecto de la Ciudad de Zaragoza y Académico correspondiente de la Real Academia de la Historia.

En 1922 ingresó como Académico de número en la Real Academia de Medicina de Zaragoza con el discurso Nuevas aportaciones a la anatomía y fisiología del corazón, de la cual sería años después su Presidente.

Falleció en Zaragoza el 14 de diciembre de 1943.

Discípulos

Entre otros, Francisco Oliver Rubio, Mariano Alvira Lasierra y Ángel López y López de Santamaría.

Bibliografía

VELADA. Velada necrológica en honor del doctor Royo Villanova. Zaragoza, Ateneo de Zaragoza y Real Academia de Medicina, 18 de enero de 1944.
LEOPOLDO CORTEJOSO VILLANUEVA. El profesor Royo Villanova, adelantado de la Tisiología. Clínica y Laboratorio, 63, 296-320 (1957).

Autor: Manuel Díaz-Rubio