Oliver Pascual, Eusebio

3 septiembre 1895 - 22 diciembre 1968

Oliver Pascual, Eusebio

Nació en Zaragoza el 3 de septiembre de 1895. Estudió la carrera de medicina en la Facultad de Medicina de Madrid, siendo alumno interno, por oposición, de Medicina Interna y siendo adscrito al Hospital Provincial junto a Juan Madinaveitia Ortiz de Zárate. Igualmente trabajó con Teófilo Hernando Ortega en cuya Cátedra fue Profesor Clínico. En 1925 obtuvo el grado de doctor con la tesis Estudio de la relación de la colesterina de la sangre y de la bilis. En 1927 ganó por oposición, la Cátedra de Patología y Clínica Médicas de la Facultad de Medicina de Cádiz, pasando más tarde, por traslado, a la de la misma disciplina en Sevilla, y por fin, también por traslado, a la de Patología y Clínica Médicas de la Facultad de Medicina de Zaragoza. Tras la guerra civil, en la que desempeñó diversas labores como Capitán Médico, en 1939 solicitó la excedencia. En 1946, ganó por oposición, la plaza de Profesor-Jefe de Medicina Interna del Hospital Provincial de Madrid y tras jubilarse en 1965, fue nombrado Profesor Emérito de la Beneficencia Provincial de Madrid.

Internista de gran formación concitó a su alrededor un gran grupo de clínicos que buscaron en él la esencia de la medicina interna. Meticuloso en la anamnesis y la exploración clínica trasmitió su importancia para ser un buen médico. Especial predilección tuvo en su quehacer científico las enfermedades del aparato digestivo, dedicando especial atención a lo largo de su vida a diferentes problemas. Muchos de sus trabajos están orientados a las repercusiones de la nutrición deficiente sobre el aparato digestivo ante todo sobre el hígado y el intestino, proponiendo el nombre de hepatoenteropatías a estas situaciones clínicas. Estos estudios y reflexiones sobre la nutrición deficiente y sus repercusiones sobre el tracto digestivo fueron resaltados por Alexis Carrel en 1943. Dedicó igualmente diversas investigaciones al mejor conocimiento fisiopatológico de la úlcera gastroduodenal, de la colelitiasis y de las enfermedades pancreáticas. Sin embargo, son de resaltar ante todo sus estudios sobre la flora intestinal alta y baja y sus aportaciones en el campo de las enfermedades hepáticas. En relación a ello publicó estudios pioneros, junto a Julián Sanz Ibáñez, sobre el posible papel de determinados enterovirus en la génesis no sólo de las hepatitis ictéricas sino en otras muchas hepatopatías. En su haber queda haber sido el primero en utilizar en España la parathormona que había sido introducida por James Collip.

Realizó una enorme labor en el desarrollo y la difusión de las enfermedades digestivas en España y fuera de ellas. Desde 1944 hasta su fallecimiento fue el Director de la Revista Española de las Enfermedades Digestivas demostrando sus capacidades y consiguiendo que la revista llegara a todas las partes del mundo. Incentivó a los especialistas a publicar en la revista cuantas comunicaciones presentaban en los congresos y el mismo publicó la mayor parte de su producción científica en ella.

Entre sus publicaciones caben mencionar, Constitución del aparato digestivo: El factor paratiroides en ulceroso gástrico (1928), La predisposición constitucional en la alergia digestiva (1934), Las vitaminas en patología: especialmente en las infecciones (1940), Observaciones sobre ciertas etiológicas y clínicas variedades de hepatitis anictéricas (1951), Infección por ultravirus en la enfermedad postcolecistectomía (1952), Alteraciones de la flora intestinal tras el uso de sulfamidas y secundario a deficiencias de la nutrición (1956), Nuevas perspectivas en la patogénesis y el tratamiento de la colelitiasis; flora intestinal, cambios hepatointestinales y deficiencia de nutrición (1957), Cirrosis esplenomegálicas (1959), Enfermedad pancreática latente (1960), Infantile and juvenile cirrhosis: viral and hereditary cirrhogenic hepatitis (1961), El factor resistencia en la infección viral causante de pancreatitis (1963), y Microscopía electrónica de la pancreatitis crónicas en la cirrosis hepática y otras enfermedades (1964). Tradujo del alemán el libro, Patología constitucional: influencia de la predisposición en las enfermedades internas (Barcelona, 1933) de Julius Bauer.

En 1947 fue nombrado Doctor honoris causa por las Universidades de Buenos Aires y Santiago de Chile y en 1962 por la Universidad de Burdeos. Miembro de Honor de la Academia de Medicina de Buenos Aires, Santiago de Chile, Lima, Río de Janeiro y Caracas (1947). Fue además Miembro de Honor del Colegio de Médicos de Aragón y de la Sociedad Francesa de Patología Digestiva. Estaba en posesión de la Gran Cruz de Sanidad. En 1921 recibió el Premio Rodríguez Abaytúa de la Real Academia Nacional de Medicina.

Falleció en Madrid el 22 de diciembre de 1968

Discípulos

Entre otros, Antonio Oliver Pascual, Eduardo Arias Vallejo, Enrique Fernández Basave, José Galán Díaz, José Eleizegui, Francisco Andolz Aguilar, Ernesto Castillo Huelves, Manuel Hernández Infantes.

Bibliografía

EDUARDO ARIAS VALLEJO. Eusebio Oliver Pascual, personalidad singular de la Medicina Española. Revista Española de las Enfermedades del Aparato Digestivo, 28, 3-6 (1969).
PEÑA “LOS CELTÍBEROS”. Homenaje al doctor Eusebio Oliver Pascual. Madrid. Grafiplás, 1970.

Autor: Manuel Díaz-Rubio

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